CAPÍTULO 37 ¡Ella no es una mujer, jefe!

En una zona oscura de los alrededores donde esos cuatro hombres fueron enfrentados, se encontraban algunos hombres. Parecía que eran los mismos hombres a los que Annabel había golpeado hace unas horas y parecía que habían recibido una llamada.

—Hola jefe, lamento decir que fallamos. Ella no es lo q...