La emboscada

Elise aceptó el reto, dejando a Hayden con los ojos abiertos de asombro.

Para sorpresa de Hayden, Elise había comenzado a desabrocharse la blusa y los pantalones; su ropa interior de seda permanecía, y su mirada era inquebrantable, desafiándola a mirarlo.

—Date la vuelta, pervertido— le dice a Hayde...

Login to Unlock ChaptersPromotion