CAPÍTULO 6

Capítulo 6

Luca me hablaba con seriedad, lo que decía no era una broma, en verdad Luciano estaba dispuesto a vender la empresa.

—Hablare con el, se que Luciano es un hombre sensato, y que le dará la razón a la lógica —bebi otro trago.

Me levanté de la silla, pero debido a los whisky que me tomé casi de un sorbo, me mareé y caí en los brazos de Luca que me sostuvo con fuerza.

—¿Tan malo es casarse conmigo? —me pregunto tan cerca de mi boca que su aliento varonil me impregnó.

—Si te casas conmigo tus juguetes tendrían que llorar tu pérdida —bromee, también el alcohol me hizo algo "bromista"

—Yo dejaría todo, un sacrificio así vale la pena —Luca se acercó, queria besarme pero en ese momento la puerta de la oficina se abrió.

Vincenzo entro furioso, como un huracán, empujó a Luca y lo lanzo al suelo.

—¡¿Que te pasa?! —le grito enojado —No te quiero ver cerca de mi novia.

Enojado me jalo del brazo ,empezó a moverme furioso mientras me gritaba una y otra vez, yo estaba paralizada, le pedía que se calmara, es un cínico.

—¡Déjame en paz! Los dos ya no somos nada, no quiero saber nada de ti —le grite enojada

Estaba furiosa, mi corazón latía fuerte mientras yo solo intentaba mantenerlo alejado de mi.

Luca se aproximo y le dio un puño que lo hizo caer al suelo, el lobo lo miro desafíante ,los dos se detestaban, era más que claro que ellos tenían una rivalidad desde hace mucho.

—¡Basta los dos! dejen de comportarse como niños pequeños, no está bien que peleen de esa manera —Ustedes no son unos niños para pelear de esa manera.

Estaba furiosa, enojada conmigo y con ellos por su patético show, sentía que el cuello me hervía.

—Dile a tu querido Ex que no tiene nada que hacer en mi oficina, el no es nadie para venir a pelear por ti preciosa —sonrio Luca que me agarró de la cintura.

—Ya te dije que la dejes, siempre quisiste esto ¿Verdad? Siempre estuviste interesado en ella —gruño mientras se acercaba.

—Ahora Alicia va a ser mi novia, los dos nos vamos a casar, sería interesante una boda doble, tu con Clara y yo con ella —Luca era rebelde y provocador, le causaba una cierta satisfacción saber que podía atacarlo y se Regocijaba en eso.

—¡Basta los dos! No voy a aguantar sus estupideces —mire a Luca y suspiré —Voy hablar con Vincenzo, los dos tenemos muchos temas aún te resolver

Mire a Vincenzo y le hice una seña para que saliéramos del lugar, mis piernas me temblaban, le pedí llevarme a su nueva oficina.

Era mucho más pequeña, lo conocía el era orgulloso y que su padre lo hubiera metido en ese lugar tuvo que ser humillante lo sé.

—¿Que quieres hablar? Creo que el tema de los dos está pausado, ahora lo único que quiero escuchar de ti que te casaras con Clara.

Vincenzo lanzo los papeles que tenía en el escritorio

—¡No lo haré! Yo no la quiero, no como a ti, nunca per nunca me casare con ella, Clara fue un error de una noche.

Le di una cachetada, mientras mi mano temblaba, mis ojos se llenaron de lágrimas

—¡No fue una simple noche! Ella es mi hermana, es parte de mi vida, te hubiera perdonado un desliz, por el amor que siento por ti, pero nunca que te metieras con mi hermana.

Me paralice al escuchar mis propias palabras, no podía creer que le hubiera dicho esto, ¿Le hubiera perdonado una infidelidad? Y la respuesta aunque me quemaba era Si.

Eso me enseñó mamá, ella le había perdonado varios infidelidades a papá, por amor, y me decía que debía fingir que todo estaba bien por el bienestar de la familia, de la sociedad.

Lo amaba, Vincenzo era el amor de mi vida, pero quería dejarlo, soltarlo para no sentir que me humillaria por un hombre.

—Por favor Alicia, tenemos una historia de amor juntos, no podemos echarlo a la basura.

Se arrodilló delante de mi, me imploro que lo perdonará, incluso que escaparamos juntos, lejos de la presión de mi familia y de la sociedad.

Se arrodilló, con sus ojos llenos de lágrimas me suplicó perdón, mientras me abrazaba con desesperación.

—Dame unos días, necesito pensar, poner mi cabeza en orden.

Me aleje y salí de la oficina, queria perdonarlo, pero mi corazon me quemaba.

—¿Ya lo perdonaste? —Luca me esperaba en la puerta mientras se sostenía del marco.

—No quiero hablar —camine y aun me sentía mareada, Luca coloco su hombro.

—No me hables, pero bebiste y no puedo dejarte ir así —coloco su hombro.

Accedí, la verdad no me sentía bien de los nervios, Luca me llevo al apartamento de Lucía pero le dije que me llevara a casa de mis padres, aún tenía algunas cosas allí.

Me dio la mano y me llevo hasta la puerta, mi padre salió y por primera vez en toda su vida, recibió de manera amable a Luca, dándole un fuerte abrazo.

—¿Quieres tomar algo? Es bueno que sangre fresca llegue a la cabeza del grupo Mondragón.

—No señor, solo vine a traer a mi prometida —sonrio burlón, el sabía que provocaba ilusiones en mi padre e incomodidad en mi.

Entre a mi habitación, empecé a empacar varias cosas para irme definitivamente a casa de Lucia, tendría que buscar un nuevo trabajo.

—Hermana, por favor creo que tenemos que hablar —me tomo de las manos llorando.

—Clara aún no estoy preparada, se que debemos hablarlo pero no estoy lista.

Mi celular sonó, era un mensaje de Vincenzo

"Mi amor te amo, y que me des una oportunidad me hace feliz"

Deje el celular sobre la cama, antes de escribirle que no era una oportunidad, solo lo pensaría porque necesitaba calmar mi vida.

Entre a mi baño para empacar mis cremas y mi tratamiento de cabello, cuando salí, Clara estaba temblando con el celular en la mano.

—¡Volviste con el! —me grito furiosa.

—Es mi vida Clara y aún no he tomado una decisión —le quite el celular de las manos molesta y le pedí que no espiara mi privacidad.

—¡No puedes volver con el! Yo lo amo, es para mí —Clara se toco el pecho y cayó en el suelo.