CAPÍTULO 52

—Si te estuviera manipulando... No habrías tenido ninguna opción en absoluto.

Esas palabras pesaban dentro de mí, deslizando sobre mi mente como cadenas invisibles.

Tenía razón.

Porque, al final, fui yo quien eligió quedarse.

Suspiré, cerrando los ojos por un momento.

—Ahora, toma tu medicina.

...