Capítulo catorce

—Vas a ser mi secretaria, slash, mi novia.

Mis ojos se abrieron de par en par ante lo que dijo. Está bien ser su secretaria, ¡¿pero ser su novia?! ¡Qué asco, eso es repugnante!

Lo miré de pies a cabeza, y cuando volví a mirar su cara, levantó una ceja por lo que hice.

—¡Eww! ¡No quiero ser la nov...

Login to Unlock ChaptersPromotion