La furia del caballero

El destino de Isabella Grace cambió en una sola noche cuando conoció a Toby, su enemigo jurado. Fue llevada al mundo de la mafia y luego descubrió que sus padres habían sido miembros de la mafia antes de que su tío los matara. No arruinemos toda la diversión, ¿sí? ¡Sí! Vamos directo a la historia, jejeje.

"¿Cómo va la universidad, Hope?" Alex sonrió mostrando todos sus dientes.

"¡Ni me lo preguntes! He estado escribiendo ensayos todo el día," bufé con molestia. "Cuanto más trato de concentrarme, más me siento como un fracaso," hice un puchero.

"Aw, ¿trabajo duro, eh? No te preocupes, sé que eres capaz de superarlo," me dio una palmada en la espalda. Le devolví la sonrisa.

Aunque nos conocimos hace solo unos días trabajando aquí, nos hicimos muy buenos amigos al instante. Estábamos en nuestra segunda ronda de hablar mal de nuestro jefe y reírnos a carcajadas. Me alegra que Alex y yo hayamos conectado tan bien en tan poco tiempo.

"¿Lo conoces?" Alex de repente señaló fuera del vidrio. Fruncí el ceño.

Estaba de espaldas a mí, así que no podía ver su cara. Llevaba una chaqueta de cuero negra y jeans negros. Por su apariencia, no creía conocerlo.

"No, ¿por qué preguntas?"

"Nada, solo parece peligroso. Ha estado paseando por aquí durante bastante tiempo. ¿Crees que debería hablar con él? Está asustando a nuestros clientes," bromeó. Solo rodé los ojos y sonreí.

No pasaron ni unos minutos cuando ese chico finalmente decidió entrar al café. Caminó directamente hacia Alex y hacia mí, sin apartar sus ojos de los míos. Ya tenía una sensación inquietante sobre este tipo, y entonces vi una pistola en su mano derecha.

¿Esto es real?

Antes de que pudiera debatir si esa pistola era real o no, despejó mis dudas levantando las manos y disparando al aire. El sonido del disparo retumbó en la habitación.

¡Santo cielo! ¿Qué demonios está pasando?

Mis oídos zumbaban por la explosión repentina. Tanto James como yo estábamos completamente conmocionados. Nos miramos con los ojos muy abiertos. Mientras tanto, dos tipos más entraron al café. Cada uno tenía una pistola en la mano. Si esto no es una escena de película de crimen, probablemente estoy soñando ahora mismo, ¡por favor sálvame Dios!

"¡TODOS FUERA!" uno de los tipos gritó desde atrás. Los clientes salieron corriendo. Un momento de caos total.

Justo cuando intentaba salir, ese chico de antes me agarró la muñeca. ¿No dijeron todos? Un escalofrío repentino recorrió mi columna vertebral.

"¿A dónde vas, muñeca?" Pude ver cómo sus labios se curvaban en una sonrisa. Una sonrisa diabólica. Sentí que mi corazón se hundía hasta mis pies.

'Muñeca', sonaba tan familiar. Sus ojos azules, los he visto antes.

Luché en su agarre. Las lágrimas ya se acumulaban en las esquinas de mis ojos. Mi corazón latía diez veces más rápido de lo normal. Solté un grito fuerte.

"Cállate. No hagas esto peor de lo que ya es," me siseó colocando su pistola bajo mi barbilla con brusquedad. Más lágrimas comenzaron a correr.

"Hey, déjala ir," vi a Alex desde el rabillo del ojo. Venía hacia adelante para salvarme. Pero le hice una señal con la mano para que se quedara allí. 'Llama a la policía', le dije con los labios.

Ni siquiera sé si entendió lo que estaba diciendo porque estaba prácticamente temblando. Supongo que me entendió porque se detuvo y se escondió detrás del mostrador para usar el teléfono fijo.

De repente hubo dos disparos más. Esta vez no al aire. Mi corazón literalmente saltó de mi pecho cuando vi a Alex caer al suelo de rodillas. Le dispararon en los brazos. Su camisa blanca cubierta de sangre.

"Te dije que no lo empeoraras," dijo dramáticamente el maniático frente a mí.

Su agarre se apretó más mientras yo me retorcía de dolor. No podía creer lo que veía. Hace unos minutos estaba riendo con Alex y ahora él estaba en el suelo gimiendo de dolor.

"Ven conmigo," murmuró entre dientes y me arrastró fuera del café. No importaba cuánto pateara y luchara, su agarre no se aflojaba. No era rival para él.

Me empujó dentro de un coche negro, entró con los otros tipos y arrancó el coche. Todo estaba muy borroso. Estaba llorando tan fuerte que no podía ni siquiera comprender lo que estaba pasando a mi alrededor. El coche comenzó a moverse a gran velocidad.

Estaba en el asiento trasero, en medio de dos personas. A mi derecha había una chica rubia que se burló de mí en cuanto la miré. A mi izquierda estaba sentado un chico. Me sonrió y dijo "hola" cuando lo miré, pero lo ignoré. Estaba casi procesando si era un secuestro o un robo. ¡Ajá! Me estaban secuestrando.

Estaba respirando muy rápido. Miré al asiento delantero y vi al 'Sr. Muñeca' de antes conduciendo el coche.

¡TOBY! ¡TOBY! ¿Cómo no pude reconocerlo?

Toby Knight, el empresario más poderoso del mundo. A menudo se ven noticias sobre él en las revistas. Todos saben que lidera la mayoría de los anillos de crimen, pero realmente no hay pruebas en su contra. Estoy secuestrada por nada menos que el infame Toby Knight.

Bueno, estoy oficialmente condenada.

"PP-Por favor déjenme ir, yo no hice nada. Déjenme ir," estaba llorando tan fuerte cuando les rogué que me soltaran.

"¿Crees que pasamos por el estrés de secuestrarte solo para dejarte ir?" La chica rubia me espetó con disgusto y rodó los ojos. Claramente no entiendo qué hice para molestarla tanto.

"¿Quieres que celebre estar aquí, Steph?" el chico a mi izquierda le espetó a la chica llamada 'Steph', supongo.

Si tan solo pudiera lanzarle un premio Nobel. Parecía odiarla con pasión, igual que yo.

"Cállate, Mike," ella le espetó de nuevo.

Escuché risas de Toby y del otro tipo que estaba en el asiento del pasajero junto a él.

"¿Por qué la trajiste, Daniel? Es inútil con esa boca que solo escupe veneno," Mike gruñó. Estaba hablando de Steph con el tipo al lado de Toby.

"Al menos soy mejor que tu novia que ni siquiera puede sostener una pistola correctamente," Steph se burló de él. Mike estaba furioso.

"Dani, dile que no mencione el nombre de Audrey," le dijo a Daniel.

"Yo nunca lo hice," Steph rodó los ojos.

Es tan dramática. Aproveché su mini discusión, que parecía distraer su atención de mí.

Estoy tan contenta de llevar siempre un spray de pimienta conmigo cuando alucinaba con seguidores espeluznantes detrás de mí, ahora sé con certeza que no estaba alucinando. Deben haber sido ellos.

Ni siquiera sé lo que estoy pensando. ¿En serio? ¿Un spray de pimienta me va a salvar de los Knight? Probablemente soy la persona más tonta viva, pero necesito darle un último empujón a mi esperanza.

Por eso saqué el spray y lo rocié en los ojos de Steph. Ella soltó un chillido. Por supuesto, todos en el coche se sorprendieron por el truco que acababa de hacer. Probablemente nunca imaginaron que haría esto. Y vaya, yo tampoco.

Rápidamente me incliné para desbloquear la puerta del coche. Y adivina qué, lo hice. Empujé a Steph y salté fuera. Todo sucedió en un movimiento súper rápido antes de que alguien pudiera hacer algo, caí al suelo con un fuerte golpe.

"Perra," escuché a Steph sisear entre dientes. Sé que se lastimó, pero ahora mismo me importa poco. Estaba corriendo por mi vida.

Escuché el coche detenerse de inmediato con un sonido chirriante. No puedo creer que me haya escapado tan fácilmente.

¿O no?