Capítulo 297

Tony me sonríe con picardía y hace una profunda reverencia. —Su alteza —murmura—. Su absoluta sorpresa es tanto ofensiva como gratificante a la vez. Le agradezco por ello.

Me río y me tambaleo hacia él, echando mis brazos alrededor de su cuello y dándole un gran abrazo. —¡Eso es increíble! —jadeo—....