Capítulo setenta y uno

Nunca antes había sentido tal desesperación en mi vida, y menos aún estando en los brazos de quien tanto amaba. No podía comprender lo que me estaba sucediendo; estaba a punto de reunirme con mis padres y entonces Aiden tuvo que venir y arruinarlo todo.

Sentía los ojos de Adrian sobre mí todo el ti...