Capítulo 27: La historia de Hemera

El aire nocturno estaba frío, y Asclepius se envolvió su capa con fuerza alrededor de los hombros mientras caminaba rápidamente por las calles de Krea. El mundo dormía, y los únicos sonidos eran el leve susurro de las hojas en el viento y el ocasional suave ronquido que provenía de alguna casa o pal...