La Caza del Magnate Dominante: Mamá de Cuatrillizos, Ni Pienses en Escapar
267 Weergaven · Lopend · Noir
Esa noche imprudente pero inolvidable vio a Lena Voss huir al extranjero—sin saber que llevaba no solo a su hijo, sino a cuatrillizos. Pero su vida tranquila se hizo añicos por completo cuando regresó a casa y se encontró con Killian Thorne. Su mirada helada pero ardiente se fijó firmemente en ella.
—¿Los niños... son míos?
—Llevan mi apellido —replicó Lena, luchando por ocultar el tumulto en su corazón.
—Cámbialo. Ahora —ronroneó él, con un tono cargado de peligro—. Nunca planeé dejarte ir después de que te escapaste esa noche.
Declaró firmemente:
—Los niños son míos. Tú también.
—Solo fuiste un error —espetó Lena.
—¿Un error? —se acercó, su voz una amenaza aterciopelada—. Para mí, fue el destino.
Una madre soltera talentosa contra un magnate de voluntad de hierro. Los cuatro pequeños juegan a ser Cupido en secreto; mientras los secretos se desvelan y la pasión se enciende—Killian es resuelto: Nadie la alejará de él. Nunca.
—¿Los niños... son míos?
—Llevan mi apellido —replicó Lena, luchando por ocultar el tumulto en su corazón.
—Cámbialo. Ahora —ronroneó él, con un tono cargado de peligro—. Nunca planeé dejarte ir después de que te escapaste esa noche.
Declaró firmemente:
—Los niños son míos. Tú también.
—Solo fuiste un error —espetó Lena.
—¿Un error? —se acercó, su voz una amenaza aterciopelada—. Para mí, fue el destino.
Una madre soltera talentosa contra un magnate de voluntad de hierro. Los cuatro pequeños juegan a ser Cupido en secreto; mientras los secretos se desvelan y la pasión se enciende—Killian es resuelto: Nadie la alejará de él. Nunca.