⋆ Capítulo 73

El interior de la limusina estaba tan silencioso que casi me hacía picar.

Cillian estaba sentado frente a mí, con las piernas cruzadas, sus ojos fijos en la ventana, mirando las luces de la calle que pasaban, o tal vez no. Mientras tanto, yo estaba aquí tratando de fingir que no estaba reproduciendo...